Política y gobierno
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Pedagogía de la exclusión
Económicamente, el neoliberalismo fracasó sin lograr alguna revitalización básica del capitalismo avanzado. Socialmente, por el contrario, el neoliberalismo alcanzó muchos de sus objetivos, creando sociedades marcadamente más desiguales, aunque no tan móviles como lo deseaba. Política e ideológicamente, sin embargo, el neoliberalismo alcanzó éxito en un grado con el cuál sus fundadores probablemente jamás soñaron, diseminando la simple idea de que no hay alternativas a sus principios, que todos, ya sea confesándolo o negándolo, tienen que adaptarse a sus normas.
Probablemente, ninguna sabiduría convencional consiguió un predominio tan amplio desde el inicio del siglo XX como el neoliberalismo hoy. Este fenómeno se llama hegemonía, aunque, naturalmente millones de personas no crean en sus fórmulas y se resistan a sus normas. La tarea de sus opositores es la de ofrecer otras recetas y preparar otros sistemas; pero no hay como prever cuando o donde van a surgir. Históricamente, el momento del cambio de una generación es una sorpresa.